El protocolo que permitió la expansión de internet, que popularizó la red (IPv4) y permitió convertir Internet en una red global cumple 40 años. Si bien los expertos valoran los aportes y aprendizajes muy valiosos de cuatro décadas de IPV4 se concuerda con que ha llegado la hora del despliegue masivo de IPv6 para dar el salto al futuro.
El protocolo IPv4 nace a su vez como la evolución del protocolo de red anterior, que no se llamaba IPv3 sino que se llamaba NCP (Network Control Program) y sumaba en un solo protocolo las funciones que hoy conocemos de IP y de TCP.
IPv4 fue capaz de escalar a una red global que dio la posibilidad de tener la internet que tenemos hoy. Es un protocolo escalable y lo suficientemente bueno para que hoy podamos ver películas y tener videollamadas sin tener que pensar mucho acerca de que es lo que hay en la red.
IPv4 empezó a funcionar cuando las velocidades típicas en Internet se medían en cientos de bits por segundo y nos sigue sirviendo hoy cuando las velocidades típicas se miden en cientos de millones de bits por segundo.
La disponibilidad de esas direcciones IP, que identifican cada computadora, móvil, tableta, Smart TV o cualquier otro dispositivo que se conecte a internet y que además puedan comunicarse entre ellos, no es infinita. Las necesidades actuales sobrepasaron las posibilidades que ofrece el protocolo IPv4, que permitía hasta ahora, conectar 4.292.967.296 aparatos a la red con una dirección única.
En ese contexto, LACNIC continúa su llamado a migrar a la nueva tecnología IPv6. Esta nueva versión, permite unos 340 sextillones de direcciones. Tiene un espacio de direcciones basado en 128 bits y su predecesor apenas alcanzaba los 32 bits.
“Esta solución es clave para que continúe el normal desarrollo de internet como la conocemos hasta ahora. Las organizaciones tienen que adaptarse al IPv6”, afirma Carlos Martínez Cagnazzo, CTO en LACNIC.
Latinoamérica está en la media mundial en adopción de IPv6, alrededor de un 30%, un usuario cada tres, puede acceder a contenido en IPv6. Sin embargo, persisten asimetrías muy importantes a nivel país dentro de la misma región.
Fuente: LACNIC