La banca tradicional pasa por un momento crítico con el incremento de requerimientos regulatorios, los costos asociados a la operación de sucursales y los riesgos cibernéticos crecientes, sin hablar de los efectos de la pandemia. En este momento más que nunca, es claro que la tecnología podría solucionar problemas y eliminar fricción, sin embargo, muchos bancos han tardado en la adopción de nuevas tecnologías.
Al igual que en otros sectores, la automatización, la biometría y el blockchain serán requerimientos para la competitividad y la supervivencia, pero en la banca hay reservas respecto a su adopción. Entender que la evolución será inevitable ayudará a que los directivos de los bancos tradicionales evalúen sus opciones y decidan si realmente les conviene esperar.
“Entender que la evolución será inevitable ayudará a que los directivos de los bancos tradicionales evalúen sus opciones y decidan si realmente les conviene esperar. Establecer metas de largo plazo y aceptar que la adopción de nuevas tecnologías pueda conducir a cambios en su modelo de operación, es la primera barrera que hay que derribar”, comentó Julián Cardona, Director Comercial de DICIO.
Es evidente que no hay nada que detenga la transformación digital de la industria, por lo que es recomendable navegar a través de los desafíos y oportunidades que implica hacer este viaje con una hoja de ruta concreta y con prioridades claras. En una industria que se basa en confianza, es indispensable tomar medidas que la refuercen.
Según expertos en la materia, la banca tradicional aún cuenta con un elemento que se llama confianza y es una ventaja real sobre nuevos modelos. El banco tradicional es un bastión de confianza para consumidores, instituciones y negocios. Pero la ventana de oportunidad para que los bancos capitalicen esa confianza migrando a procesos más ágiles, transparentes y amigables, no es eterna.
“Aquí es donde entra la tecnología de DICIO para complementar a la banca minorista. Abrir cuentas, subir documentos, transaccionar de manera remota, contar con un reconocimiento biométrico añade valor, conveniencia equivalente a una banca digital o Fintech. A diferencia de una Fintech, en este momento de la historia, la marca y el respaldo de un banco tradicional son elementos que brindan confianza y respaldo a los clientes”, finaliza Cardona.