Minsait ha lanzado una propuesta diferencial para acelerar la transformación digital de las empresas mediante la implantación de redes privadas 5G en entornos industriales. Esta solución end-to-end abarca desde la definición de las necesidades a cubrir en la industria, su despliegue, hasta la gestión y la supervisión de toda la red privada.
De esta forma, Minsait pone a disposición de las compañías los beneficios de todo el potencial que ofrecen estas redes para la implementación de casos de uso en las empresas, con capacidad de proporcionar conectividad 5G (y 4G) para comunicaciones en zonas remotas con cobertura escasa o nula.
Aunque cada vez hay más posibilidades de utilizar espectro libre o bandas compartidas a disposición de la industria, también es posible llegar a acuerdos de compartición de espectro con las operadoras, como complemento de sus redes en entornos rurales o aislados, y para clientes que quieran mantener el control total de su red garantizando su seguridad y privacidad.
Las redes privadas 5G tienen numerosas posibilidades de aplicación a industrias verticales como son la fabricación, energía (utilities), construcción y minería, el transporte y la logística, o el entretenimiento y la agricultura. Proporcionan un mayor nivel de seguridad y privacidad, así como mejores prestaciones, fiabilidad y movilidad respecto a otras redes (por ejemplo, wifi).
Asimismo, el 5G aumenta el ancho de banda, el número de dispositivos y disminuye la latencia con respecto a las redes móviles anteriores. Además, estas redes privadas, que son totalmente compatibles con otras redes existentes, cuentan con una flexibilidad y personalización que mejoran la eficiencia, el ahorro de costes y, a su vez, facilitan la construcción de nuevos casos de uso en las industrias verticales.
La solución para redes privadas 5G de Minsait se basa en el concepto Network in a box y utiliza un equipamiento reducido con componentes pre-integrados y de fácil implantación, como un core de red móvil virtualizado y computación en el borde, que permite despliegues rápidos a menor coste.
Para garantizar un buen despliegue, no obstante, es importante contar con socios tecnológicos confiables con los que ayudar a las industrias a definir los requisitos necesarios para cubrir sus expectativas y poder superar la complejidad que, inicialmente, puede suponer una implementación de este tipo, asegurando al mismo tiempo que la relación coste-beneficio sea positiva.
Fuente: Minsait
