Desde hace algunos años, dos industrias dieron paso a una revolución, rompiendo los viejos modelos de negocio de telecomunicaciones y de la industria financiera digital, dando entrada a los telcobanks, compañías que combinan los servicios en telecomunicaciones, financieros y digitales, para ofrecer una opción integral de telefonía y banca en línea más eficiente.
Desde su creación han destacado por ser accesibles e inclusivas, lo que se traduce en una real inclusión financiera en continentes como el africano, europeo asiático y uno ha surgido en el latinoamericano.
“Los telcobanks tienen el potencial de revolucionar, sobre todo, economías emergentes y subdesarrolladas, en donde el efectivo sigue teniendo un papel predominante, donde la gente tiene miedo a los bancos e incluso a la digitalización, lo que da como consecuencia una brecha de inclusión financiera. Los telcobanks tienen la posibilidad de llegar a la gente con otro enfoque, ya que no ofrecen más de lo mismo en lo que respecta a una solución financiera, sino que además ofrecen una alternativa de telefonía” opina Modesto Gutiérrez, Co-Founder y Presidente de Miio.
Aunque el Telcobank es un concepto que se delata como nuevo en América Latina, en otras regiones del mundo han tenido gran impacto, como M-Pesa, que lleva 13 años operando en Kenia por Safaricom (Grupo Vodafone, UK), su operador de telefonía móvil líder en ese país, el cual permite a los usuarios enviar y retirar fondos usando su teléfono celular, sin necesidad de tener una cuenta bancaria, lo que les permite hacer transacciones desde 40 mil puntos de venta del país.
Latinoamérica no se ha quedado atrás, y como ejemplo está, Miio, compañía mexicana que vio la luz en 2019, y la cual actualmente cuenta con 40 mil usuarios afiliados, con un crecimiento mensual de 25%.