De acuerdo con una encuesta de Mastercard casi dos tercios de los consumidores han probado un nuevo método de pago en los últimos 18 meses, esto destaca que hay otras formas de pago. Dicha situación, se enfatizó a raíz de la pandemia de Covid-19 por lo que se aceleró el cambio hacia la banca digital.
Desde el aumento de los pagos sin contacto hasta las tarjetas ecológicas, todos los jugadores del sistema financiero siguen innovando sus métodos de pago para satisfacer las demandas de los consumidores y a medida que crece el entusiasmo por formas de comprar más convenientes y sencillas, los hábitos de los consumidores siguen evolucionando.
La preocupación por la salud y la seguridad derivados de la situación de sanidad que se vive ha llevado a los consumidores a optar por métodos de pago que eliminen el contacto físico durante las transacciones y como resultado de ello, el número de compras sin contacto realizadas en los primeros meses de la pandemia se duplicó en comparación con el mismo mes del año anterior.
Aunque la demanda de esta forma de liquidación varía de un país a otro, en general está aumentando en todo el mundo; por ejemplo, en abril de 2020 el límite de los pagos sin contacto aumentó a 45 libras en el Reino Unido y a 50 euros en la mayoría de los países europeos.
Las instituciones financieras también han ampliado sus métodos de pago sin contacto para satisfacer esta demanda y ahora los usuarios pueden elegir entre una amplia variedad de opciones como cajeros automáticos sin contacto, monederos electrónicos, pagos QR y tarjetas de pago biométricas.
Otro ejemplo de la forma en que nuestros hábitos de pago están cambiando es el aumento de los pagos por teléfono móvil. Según un informe reciente de UK Payment Markets 2021, el número de personas registradas para realizar pagos por celular a fines de 2020 aumentó un 75% en el último año y superó los 17 millones; además, más de la mitad utiliza este método para realizar pagos quincenales o frecuentes.
El ecosistema tecnológico de los pagos por teléfono móvil sigue ampliándose con billeteras electrónicas que ofrecen una forma conveniente de almacenar la información de los pagos y las tarjetas en el dispositivo móvil del usuario.
La reciente decisión de Mastercard de eliminar progresivamente las bandas magnéticas de todas las tarjetas para 2033 apunta a la posición establecida de las tarjetas Europay, Mastercard y Visa (EMV) y a las ventajas de seguridad inherentes que aportan. Esto ha sido posible gracias a la adopción masiva de las tarjetas EMV en todo el mundo.
Con el tiempo, esto dará lugar a una mayor innovación en los métodos de pago a medida que las instituciones financieras se adapten y respondan a las demandas de los consumidores.
Por Danilo Ochoa, Sales Manager México y Centroamérica, Servicios de Banca y Pagos en Thales