La inclusión financiera sigue siendo un reto en todo el mundo, especialmente para las mujeres. La imposibilidad de acceder a los servicios financieros limita sus opciones de planificar y gestionar mejor sus ingresos.
Si bien en la Argentina la participación de la mujer en el mundo cripto aún es baja, la brecha de género detuvo su crecimiento gracias al incremento en la participación de mujeres en la industria cripto como expertas y también como usuarias.
A nivel global, el número de usuarios que se identifican como mujeres en la plataforma Paxful ha aumentado de manera constante en los últimos dos años. Sin embargo, a través de un análisis se reveló el perfil de género predominante en su plataforma, sólo el 17% de los usuarios en Argentina son mujeres frente al 80% representado por hombres y el 3% de género indeterminado.
A su vez, un estudio realizado este año por la empresa Bakkt Holdings, señala que el principal obstáculo para las mujeres es el desconocimiento acerca del tema. Más del 70% de quienes no poseen criptomonedas, argumentan no tenerlas debido a tener escaso o nulo conocimiento sobre las mismas. En comparación con el 13% de hombres y un 22% de mujeres que sí están informadas.
Asimismo, los datos del estudio muestran que, una vez que las mujeres entran en el espacio de las criptomonedas, la brecha de género se reduce, con un 54% de hombres y un 32% de mujeres que califican su conocimiento como “alto” o “muy alto” frente a sólo el 6% de las mujeres que no operan con criptomonedas.
Daiana Gómez Banegas, Gerente de Marketing de Latinoamérica de Paxful, explica cómo cualquier mujer puede acceder a Bitcoin para cubrirse de la inflación y las crisis económicas del país “El Bitcoin es un activo deflacionario que permite tener una reserva de valor que no se deprecia con el tiempo, y no está sujeto a los cambios de la emisión monetaria”.
Hay que tener en cuenta que las mujeres son las que habitualmente están excluidas del sistema financiero, como herramienta persona a persona, Bitcoin ofrece acceso a una nueva forma de financiación cooperativa, y a herramientas innovadoras que permiten a las mujeres acceder a un mercado financiero global de forma más eficiente.
En cuanto al capital de inversión inicial, Gómez Banegas indica que “no hay una barrera de compra mínima”. El Bitcoin es para todos. Por eso es recomendable hacer pequeñas entradas mensuales o compras periódicas de la criptomoneda para compensar las fluctuaciones que haya podido tener en el precio, y así poder obtener una compra media.
“El Bitcoin, al ser un activo con una escasez matemática programada, se revaloriza con el tiempo y, a pesar de las pequeñas fluctuaciones estacionales, a lo largo de 11 años siempre ha demostrado aumentar su valor. Por esta razón, una de las primeras formas de obtener beneficios económicos es tenerlos y almacenarlos. Pero, sea cual sea la alternativa, el primer paso es aprender a gestionarlos, y esto lleva tiempo y requiere precaución”, explica.
Fuente: Paxful