El término Metaverso no es nuevo, sin embargo, hoy estamos viviendo un momento de explosión, una nueva realidad que cambiará nuestras vidas para siempre. Se trata de un movimiento hacia lo nuevo y desconocido que al ser humano le inspira sentimientos y actitudes diversas.
En este informe analizamos, entre otros temas, el papel de las marcas en esta transformación, la millonaria inversión realizada en la industria del metaverso, lo que nos depara un futuro no tan lejano y una serie de recomendaciones que las empresas pueden adoptar durante el proceso de cambio.
¿Qué es un metaverso? Sin existir un consenso, y asumiendo que es un concepto líquido que irá evolucionando, tomamos la definición de metaverso de Oscar Peña, de 2022, que habla de una representación tridimensional, inmersiva y conectada de Internet. Un universo virtual persistente, social y descentralizado, en el que los consumidores son capaces de saltar entre diferentes experiencias virtuales.
Así, el metaverso nos ofrecerá experiencias inmersivas mejoradas desde cualquier dispositivo y podremos hacer casi cualquier cosa que se pueda realizar en el mundo físico, entretenernos, comprar, trabajar, socializar. Incluso, podremos poseer elementos virtuales únicos, gracias a los NFT y pagarlos mediante una moneda propia.
De acuerdo a una investigación de la consultora internacional Analysis Group, dentro de una década el metaverso podría aportar 3 billones de dólares, un 2,8 % al PBI mundial, si en términos de adopción evoluciona de la misma manera que la tecnología móvil.
Según Gartner, en 2026, el 25% de las personas pasará al menos una hora al día en este entorno y, de acuerdo a Statista, el tamaño del mercado actual roza los 47.000 millones de dólares en 2022 y la proyección es que alcance los 679.000 millones en 2030.
El despliegue de un metaverso tangible y masivo será progresivo a lo largo de los próximos años, ya que todavía se está desarrollando la tecnología que pueda hacerlo real. Pero esto no implica que debamos quedarnos parados. Los más innovadores pueden crear ventajas competitivas como hicieron otras compañías en los inicios de Internet.
Algunos gigantes tecnológicos como Microsoft, Qualcomm y Meta ya están apostando fuertemente por el metaverso y su potencial para caracterizar el próximo capítulo de Internet. El fundador de Meta asegura que el metaverso “hiperconectará” a las personas con aplicaciones y servicios que enriquecerán enormemente su modo de vida.
Crear el metaverso, tal como se concibe hoy en día, requerirá una red de alta velocidad, baja latencia, altamente segura y confiable, de la que actualmente no se dispone. Además, en los próximos años iremos viendo avances que trascienden el software y se irán lanzando al mercado nuevos dispositivos, que permitan conectarnos con esta nueva realidad.
Fuente: LLYC