La innovación se ha vuelto un valor cada vez más relevante para los negocios, haciendo que la digitalización y la IA adquieren un papel cada vez más protagónico en el futuro del trabajo, abriendo también nuevas oportunidades y desafíos al hacer de la tecnología un eje de productividad.
Un punto de transformación ha sido el despliegue de modelos laborales remotos e híbridos, donde para habilitar a equipos de trabajo distribuidos es necesario proporcionar niveles de conectividad, rendimiento y eficiencia nunca antes vistos.
En ese sentido, Gabriela Alvarado, gerente de ventas SMB para AMD México, Centroamérica y El Caribe, dio a conocer algunos puntos clave que definirán las tendencias de trabajo en los próximos años, y que abrirán un nuevo universo de posibilidades para las organizaciones.
En el caso del trabajo híbrido, “es notorio que los profesionales actuales necesitan equipos de cómputo más robustos, en pleno 2023, la velocidad con que trabajamos un documento, exportamos archivos o bases de datos, o incluso sincronizamos nuestro correo, pueden marcar la diferencia para poder ser más eficientes”, señaló la ejecutiva.
De acuerdo con un estudio realizado por la consultora McKinsey, la IA generativa actual y otras tecnologías tienen el potencial de automatizar tareas que hoy absorben entre el 60% y el 70% del tiempo de los empleados, dependiendo del ritmo de adopción digital y de la reasignación del tiempo a otras actividades.
Esto trae consigo una enorme oportunidad para las PyMES, pues dotar a sus colaboradores de computadoras preparadas para el trabajo moderno hará que tengan una ventaja real en sus respectivos sectores.
Para Alvarado, “es en este escenario que los Procesadores AMD Ryzen PRO entran en juego, pues están diseñados para potenciar las mejores PC empresariales del mundo, con tecnologías inteligentes, el primer motor de IA del mundo para una plataforma x86 y un cuidadoso enfoque en la eficiencia. En el mundo de los negocios la velocidad marca la diferencia”.
Y es que, de cara al futuro, se estima que para el 2030 la IA podría aportar hasta 15.7 billones de dólares a la economía mundial, más que la producción actual de China e India juntas. De esta cifra, 6,600 millones procederán del aumento de la productividad y 9,100 millones de los efectos sobre el consumo, de acuerdo con un análisis de PWC.
Según una encuesta realizada por la OCDE, en México el porcentaje de adultos que tienen un nivel alto de competencia en la resolución de problemas en entornos de tecnología es de solo el 1.5 %, en comparación con el promedio de la OCDE del 5.1 %.
Fuente: AMD