De acuerdo a cálculos del reporte “Global Artificial Intelligence Study: Exploiting the AI Revolution de PwC”, para 2030, el 45% de las ganancias económicas de todos los sectores productivos vendrán de la mejora de productos; particularmente, porque la IA impulsará una gran variedad de opciones.
Al respecto, los temas financieros no están fuera de esta transformación, ya que cada vez son más las empresas que incorporan herramientas de IA en diversas categorías, ya sea para reducir costos, analizar presupuestos, elaboración de informes financieros, predicciones de mercado, gestión de riesgos hasta la detección de fraudes.
“La IA está cambiando las finanzas de las empresas. Por un lado, es una tecnología habilitadora que automatiza y perfecciona procesos de todo tipo; por el otro, presenta herramientas muy poderosas para mapear a la parte más importante de cualquier industria: el cliente o el usuario final”, explica Alan Ramírez Flores, CEO de Coperva.
Según registros de Quantum Black de McKinsey & Company, entre 2017 y 2022 la adopción de herramientas de Inteligencia Artificial se ha multiplicado en 2.5 veces. Junto con esa expansión, a lo largo de los últimos años las estrategias empresariales basadas en IA se traducen en cerca de 20% de ganancias.
“El objetivo es que tanto empresas como personas puedan tener finanzas más sanas; no obstante, terminar con la cartera vencida (que es un gran reto) será prácticamente imposible, ya que la falta de pago no necesariamente se relaciona con una mala gestión financiera, también influyen factores externos como gastos imprevistos o desempleo, pero para ello la IA también tiene soluciones”, afirma Ramírez.
Al respecto, asegura que la IA puede ayudar a los deudores a reestructurar sus finanzas y a hacer un plan de pago de deudas funcional y personalizado, a fin de cumplir el objetivo sin sacrificar gastos básicos o necesarios.
Fuente: Coperva