La IoT ha sido uno de los conceptos en boga en el 2016 en el sector regional de TIC. Machina Research estima que el número total de conexiones de IoT a nivel mundial aumentará de 6.000 millones en 2015 a 27.000 millones en 2025, lo que supone una CAGR de 16%.
Por su parte, según Frost & Sullivan, el IoT representa un gran impacto positivo en la economía mundial de aquí en adelante. América Latina no tiene alto índice de adopción de esta tecnología – apenas 7% de las empresas usan IoT –, de acuerdo con el estudio, y tal vez esa sea la gran oportunidad de la región para tener casos de éxito pioneros. El concepto de smart city puede ilustrar esos cambios, pues promete transformar para mejor las ciudades y la rutina de los ciudadanos.
Desde el punto de vista industrial, el análisis de la consultoría Lux Research señala que, en 2020, el mercado global del Internet de las Cosas Industrial (IIoT) debe mover US$ 151 mil millones. En ese contexto, la infraestructura de redes de datos y de telecomunicaciones, la evolución de los dispositivos móviles y la capacidad de soportar todas las aplicaciones en la nube tendrá un papel fundamental.
Laudálio Veiga Filho, presidente del Futurecom, expresó: “La tecnología está lista para ser usada y las posibilidades son tan infinitas como la capacidad creativa del hombre. La inversión en pesquisa y el desarrollo es el comienzo. IoT está en el centro de las innovaciones que se vienen y de las que ya están entre nosotros”.
