La economía de América Latina se contraerá 1,1% en 2016, arrastrada por las caídas de Venezuela, Brasil, Argentina y Ecuador, pero para 2017 se espera una «tenue» de recuperación de 1,3% en medio de la incertidumbre sobre la política de Donald Trump en Estados Unidos, indicó la Cepal.
«La región finalizará 2016 con una contracción promedio de 1,1%, en la que América del Sur será la subregión más afectada, con una caída de 2,4%», indicó un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) presentado en su sede en Santiago.
La caída presenta la continuación del proceso de desaceleración y contracción que sufre la región desde 2011 por el descenso en el valor de las materias primas. A ese proceso, se sumó en 2016 «una fuerte caída de la inversión y del consumo» en Venezuela, Brasil, Argentina y Ecuador.
La economía venezolana, en medio de una aguda crisis política y económica, liderará las caídas con una contracción del 9,7%, seguida de Brasil (3,6%), Argentina (2%) y Ecuador (2%).
Por su parte, República Dominicana liderará el crecimiento de las economías de Centroamérica con un 6,4%, seguido por Panamá (5,2%), Nicaragua (4,8%) y Costa Rica (4,1%), dando cuenta de la pujante situación de Centroamérica en contraste con la de los países de América de Sur, que en conjunto cerrarán con una caída del 2,4%.
En 2017, el crecimiento de Latinoamérica estará en buena medida condicionado por factores externos, como su inserción en la globalización, sobre la que pesan nuevos factores como las tentaciones proteccionistas o el desafío de mejorar de forma concertada los intercambios de la región con China.