NFC es la tecnología que permite realizar pagos acercando el celular o tarjeta a un lector compatible, sin necesidad de contacto físico. Está redefiniendo el futuro de los pagos digitales en la región.
Es fácil, rápido y sin contacto: se agregan las tarjetas a Google Pay o Apple Pay y para pagar sólo hay que acercar el celular al lector (POS). Además es seguro, cada transacción genera un código único y no se comparten los datos reales de las tarjetas.
El 56% del total de usuarios de Ualá tienen un dispositivo con NFC. El 72% usa Android (Google Pay) y el 28% iOS (Apple Pay). Quienes usan estas plataformas tienden a ser más fieles: priorizan este medio de pago, pero también siguen utilizando QR y Prepaga.
El transporte público fue un motor clave de crecimiento (para muchos usuarios fue el primer contacto diario con esta tecnología). Más de 150 líneas de colectivos en Buenos Aires y las principales ciudades del país ya están habilitadas. El próximo paso será su aplicación en trenes.
A sólo tres meses del lanzamiento, las compras con tarjeta desde el celular ya representan el 16% de las transacciones presenciales. Además, el 13% de los usuarios que realizaron compras en comercios físicos en el último mes eligieron esta modalidad, que registró un crecimiento mensual superior al 25% en cuentas y transacciones.
El 66% de los encuestados usan más de una forma de pago. La principal forma es la transferencia, con un 85% de penetración. Funcionan con una lógica informal, ya que es directa entre las personas, sin comprobantes ni seguimiento. En tanto, los pagos con tarjeta desde el celular ya son elegidos por 1 de cada 6 personas.
El uso de pagos con tarjeta a través del celular (tanto NFC como QR) se expande y se instala por su rapidez y practicidad: más de la mitad de quienes lo usan empezaron el último año.
El principal impulso del uso son las promociones, pero lo sostiene la experiencia. 4 de cada 10 usuarios lo empezaron a usar porque quisieron aprovechar un beneficio. Otras ventajas que destacan los usuarios es la posibilidad de no tener que llevar tarjeta (63%) y la rapidez (55%). La falta de información clara y la incertidumbre sobre la compatibilidad tecnológica son las principales barreras.
Fuente: Ualá








