Bajo el concepto de vivir nuevas experiencias, México te propone disfrutar de una estadía en hoteles fuera de lo común, que ofrecen servicios que despiertan los sentidos del buen vivir y un descanso reparador, el relax y distención en un buen masaje sumado a los sabores de una excelente gastronomía. La diversión y el entretenimiento completan la gama de servicios que ofrecen estos hoteles, que estratégicamente ubicados encantan a sus visitantes con un diseño y arquitectura distintiva que añade valor a la exuberante naturaleza que los rodea.
Hotel Verana, Yelapa
Ubicado a 45 minutos de Puerto Vallarta, llegar Yelapa sólo es posible en barco. Pero es un viaje que vale la pena. Situado en el extremo sur de Bahía de Banderas, este antiguo pueblo de pescadores, cuyo nombre significa “lugar donde las aguas se juntan” se convirtió en uno de los lugares más codiciados en el Pacífico.
Aquí se encuentra el hotel Verana. Si lo que necesita es disfrutar de una buena bebida, meditar y disfrutar de las vistas increíbles, este es su lugar. Entre todos los alojamientos que el hotel ofrece, el que más llama la atención es la casa V. Un alojamiento que se encuentra rodeados de forestación que deja una sensación de estar colgado de los árboles a sus huéspedes por su ubicación, su gran vista y confort.
El acceso a este maravilloso lugar no es tan fácil, pero la aventura para llegar hasta allí es parte del encanto. Dirigido al público adulto, este es un lugar rodeado de selva nativa, con las cascadas, vistas impresionantes, flora y fauna local, y todo se puede recorrer todo a pie o a caballo.
Hotel Endémico, Ensenada
Al norte del municipio de Ensenada, en el estado de Baja California, el Hotel Endémico posee un paisaje único. Hogar de uno de los viñedos más grandes del país, ofrece una mezcla de la cultura mexicana y actividad artesanal. Este hotel posee 20 cabañas de lujo que se fusionan con su imponente entorno natural.
Un panorama cinematográfico es la tarjeta de presentación para esta experiencia única en el desierto mexicano. Al llegar al hotel, los huéspedes son recibidos con una copa de vino de la casa, que se puede saborear mientras disfruta de las impresionantes vistas del valle. El restaurante y el bar están en la terraza, muy cerca de la piscina y jacuzzi, proporcionando un momento de relax junto a paisaje imperdible. Las habitaciones, que también están en lo alto de la montaña, ofrecen una comodidad incomparable: cama king o dos camas dobles, vista panorámica del valle y una terraza privada.
Tubohotel, Tulum
¿Te imaginas dormir dentro de unos tubos de hormigón? Bien, en México es posible. Situado a una hora al sur de la Ciudad de México, específicamente dentro de un jardín orgánico en el Pueblo Mágico de Tepoztlán, Morelos, el Tubohotel se convirtió en un gran punto turístico.
Aunque a primera vista no parece muy atractiva la idea, las habitaciones son cómodas y tienen un entorno visual sorprendente, sin afectar el medio ambiente natural. La disposición de los tubos fue aleatoria para respetar la topografía y algunos están dispuestos en la forma de pirámides.
Este hotel cuenta con 20 habitaciones de hormigón equipadas con una cama matrimonial, lámpara de escritorio, ventilador, un cajón de abajo de la cama y cortinas para mantener una cierta privacidad. Y todas tienen vista al patio central.
Los tubos son térmicos y mantienen una temperatura agradable durante el día y durante la noche. También hay una pequeña piscina para refrescarse y tomar un poco de sol. El hotel no posee restaurante propio, pero ofrece un delicioso desayuno con pan casero, zumo, fruta y café.
Este hotel boutique de varios semi pisos es una forma interesante de utilizar el espacio con los materiales existentes y sería una parada de diversión en cualquier escapada de vacaciones.
Quinta Real, Zacatecas
Quinta Real se encuentra en la ciudad de Zacatecas, considerada patrimonio de la Historia de la Humanidad desde 1993. Este es el único hotel en el mundo que se construyó a partir de una antigua plaza de toros de 1866, una creación con un paisaje increíble y sorprendente.
La plaza de San Pedro, en la capital del estado de Zacatecas, fue construida en 1866 y se utilizó para ferias taurinas hasta 1975, en que se celebró la última corrida. Luego fue sometida a un proceso de restauración y reforma para reaprovecharlo turísticamente como alojamiento, abriéndose a su nuevo uso en 1989.
Es un lugar sumamente romántico, donde ya han pasado un sinfín de propuestas de matrimonio y fiestas. La comida es un punto fuerte de este hotel, donde podrá degustar lo mejor de la cocina mexicana.
Las habitaciones se ordenan en torno a un patio típico con una fuente. En lo que antes eran los toriles se ubica ahora el restaurante, denominado, claro, El Ruedo. Además hay gimnasio, bañeras de hidromasaje, aire acondicionado, centro de negocios, acceso a Internet y otros servicios que nunca se hubieran imaginado los diestros cuando realizaban allí sus faenas.
Ubicado a solo unos 15 minutos de caminata, se llega al centro histórico de Zacatecas, donde se puede disfrutar de los monumentos históricos, calles y laberintos de encanto colonial. La ciudad refleja la riqueza extraída de las entrañas de la tierra, que se manifiesta en forma de edificios hermoso, arte, joyas y artesanías.
Cantil, Hotel Boutique & Spa, Xalapa
Situado a unos 40 minutos de la ciudad de Xalapa, Veracruz, se encuentra el Hotel Boutique & Spa Cantil, un lugar de características imponentes donde se sentirá un poco más cerca del cielo.
Situado en lo alto de una montaña, el lugar es perfecto para realizar actividades como parapente, rappel, escalada y otros deportes de aventura. También se puede disfrutar de una incomparable vista desde las alturas que hacen sentir la paz y la tranquilidad de los alrededores de este hotel.
Con un diseño moderno y elegante, el hotel posee un excelente spa, una piscina al borde de un acantilado, un juego de ajedrez gigante en el escenario, suites de lujo y servicios de primera calidad. Si desea salir de los destinos y alojamientos clásicos, este es el lugar para visitar.
