Se espera que la IA influya en el crecimiento del volumen de ciberataques en los próximos años. Las tecnologías de inteligencia artificial pueden impulsar la creación de nuevas técnicas de ataque, explotando nuevos tipos de ataques conocidos. La capacidad de generar nuevas técnicas utilizando herramientas de inteligencia artificial puede ayudar a grupos de atacantes a optimizar la generación de códigos de ataque sin crearlos ellos mismos.
También se verá el crecimiento de amenazas como: Ofertas RaaS (Ransomware como servicio), campañas de phishing, intentos de robo de identidad. A su vez habrá una mayor dependencia de las arquitecturas de confianza cero.
El modelo de confianza cero se convertirá en la postura por defecto de muchas organizaciones, impulsado por un aumento de los ciberataques sofisticados, el trabajo remoto y la adopción de servicios en la nube.
Los grupos de criminales informáticos especializados en ransomware seguirán aumentando sus ataques, pero serán más selectivos y trabajarán para atacar los servicios de la cadena de suministro para interrumpir y perjudicar a las organizaciones de Latinoamérica y de todo el mundo.
Si bien habrá cierto alivio con la utilización del aprendizaje automático y la IA generativa, la IA no resolverá la inminente crisis de talento. En 2024, seguirá siendo extremadamente difícil encontrar y retener el talento necesario e identificar trabajadores con las habilidades necesarias en nuevas áreas como la seguridad de la ciencia de datos. Esto probablemente conducirá a asociaciones con proveedores de recursos humanos bajo demanda o servicios gestionados para funciones no esenciales.
Fuente: Akamai Technologies