Tecnologías como la inteligencia artificial y la realidad virtual junto con Big Data, ofrecen condiciones óptimas para una cuarta revolución industrial. Las industrias que las apliquen incrementarán más de un 25% su productividad en los próximos cinco años.
El Big Data pone a las empresas ante una encrucijada: cómo lograr que los datos jueguen a favor del negocio y no al revés. Con la tecnologías de la industria 4.0 y la transformación digital se abren nuevos escenarios para no hundirse en los data lakes y transformar una gestión en rentable.
Recientemente se difundió un informe de Boston Consulting Group que sostiene que si bien la Industria 4.0 está presente en las discusiones de planificación de las empresas argentinas, solo un 30% de las empresas encuestadas ha implementado iniciativas concretas. Una pequeña porción de ellas tiene una estrategia definida, con un ‘roadmap’ modesto o limitado a proyectos con objetivos a menor escala.
Se estima que las «smart factories», aquellas fábricas que incorporen la tecnología de la industria 4.0, incrementarán en más de un 25% su productividad en los próximos cinco años. El informe también destaca que una de las barreras para incorporar esta tecnología es, según los ejecutivos encuestados, la oferta limitada de proveedores locales de las nuevas tecnologías y los precios elevados dificultan su adopción.
Claudio Di Salvo, gerente de proyectos de Snoop Consulting explicó que “Las tecnologías que utilizamos para encarar los proyectos de soluciones digitales para la industria 4.0 son técnicas aplicables a Big Data, Analytics, Análisis predictivo y Streaming Analysis para analizar la información no estructurada y compleja, como videos. Se utilizan además machine learning, reconocimiento facial y realidad aumentada (RA), ligadas a la inteligencia artificial como Álvarez, el sistema que desarrollamos para el área de RRHH de las empresas”.