El financiamiento es una de las principales políticas que necesita toda empresa para lograr sus objetivos a corto y largo plazo. En un mundo globalizado y cada vez más competitivo, no sólo necesitan de la financiación para continuar con su crecimiento y expansión, sino incluso para mantenerse en el mercado y no suspender potenciales transacciones (cuando el comprador no tiene todo el capital).
¿Pero por qué pensar en una financiación alternativa a las existentes? Para las compañías, el financiamiento es una herramienta relevante, ya que en muchos de los casos, suele ser el motor que impulsa el funcionamiento. Las mejores condiciones de acceso al financiamiento de las empresas se pueden traducir, entre otras cosas, en aumentos de productividad, incrementos de la innovación tecnológica y hasta una mayor probabilidad de entrar a los mercados internacionales.
“Si bien registramos un aumento constante en el consumo a través de las tarjetas de crédito (57,8% durante noviembre) es necesario para las compañías tener a disposición una financiación que no dependa de una tarjeta bancaria. De esta forma, abren el juego e incrementan sus posibilidades de venta, ofreciendo una financiación personalizada y creada a la medida de cada comprador”, comentó Maru Reginatto, Directora de Operaciones de Wibond.
Comprar ahora y pagar después es una alternativa al crédito y brinda la flexibilidad de adquirir y acceder a lo que cada persona o empresa quiera. Hace seis meses que en el marcado argentino varias empresas como Blangino, Grido y AutoCity emplean un sistema de financiación alternativo, que no depende de una entidad bancaria y que emite financiamiento y tasas de acuerdo al perfil del comprador, netamente personalizado y asegurando la transacción. Actualmente, más de 35 empresas en Argentina cuentan con este sistema de financiación alternativa y llevan financiado más de 2500 compras.