Gen presentó sus predicciones sobre ciberseguridad para 2026, en las que pronostica un año marcado por realidades difusas, identidades sintéticas, manipulación emocional a gran escala y un entorno de navegación que se convertirá en el principal campo de batalla de la vida digital cotidiana.
Según los Laboratorios de Amenazas de Gen, 2026 marcará el momento en que Internet evolucionará más rápido de lo que la intuición humana podrá seguirle el ritmo. La IA no solo acelerará las experiencias digitales, sino que también remodelará la confianza, la identidad y la verdad misma.
“Los ciberdelincuentes ya no se adaptan a la tecnología, sino que la dirigen. Desde la identidad hasta las emociones, pasando por el propio navegador, cada rincón de Internet se está convirtiendo en un espacio en disputa. Nuestro objetivo es preparar a las personas para la realidad que se avecina y dotarlas de los hábitos y las herramientas que les permitan mantenerse seguras”, afirma Siggi Stefnisson, director de tecnología de ciberseguridad en Gen.
El engaño saldrá de la pantalla y entrará en la vida cotidiana, ya que la IA hará posible clonar el rostro, la voz y el estilo de escritura de una persona en cuestión de segundos. Surgirán personajes sintéticos (amigos, colegas, influencers e incluso parejas sentimentales), con un realismo impactante.
En 2026, Internet entrará en un ciclo de distorsión impulsado por la inteligencia artificial. El contenido generado por máquinas será recopilado, resumido y republicado por otras IAs, lo que degrada la precisión y crea una avalancha de ruido sintético.
Las estafas pasarán de ser guiones genéricos a motores emocionales adaptables. Con el análisis de sentimientos en tiempo real, la IA detectará el miedo, la vacilación, la culpa o la emoción, y adaptará las respuestas al instante.
La IA ahora generará kits de identidad completos (identificaciones realistas, facturas, selfies e incluso videos en vivo) que superan la mayoría de las verificaciones básicas. Los delincuentes utilizarán estas identidades falsas para obtener préstamos, abrir cuentas y cometer fraudes a gran escala en múltiples plataformas.
El navegador se ha convertido en el entorno más atacado en 2025, y esta tendencia se ampliará en 2026. La publicidad maliciosa generada por IA, las tiendas falsas, las ventanas emergentes maliciosas y el robo de tokens de sesión dominarán la delincuencia en línea. Hacer clic en lo que parece ser un enlace de un banco o una tienda puede llevar a una clonación generada por IA 3diseñada para robar datos de pago o credenciales de inicio de sesión.
El malware se encuentra cada vez más dentro de la propia página, y no en las descargas, lo que dificulta su detección incluso para los usuarios más cautelosos.
Fuente: Gen







