La baja de casos de COVID-19 y la progresiva apertura de actividades llevan a las organizaciones a analizar cuáles serán aquellos aspectos organizacionales que surgieron como excepción durante la pandemia y que se mantendrán por lo menos en el mediano y largo plazo.
En materia de capital humano, lo cierto es que el de los beneficios es uno de los temas donde es posible ver una importante cantidad de cambios entre lo que había hasta marzo de 2020 y lo que se está dando en la actualidad, según un relevamiento realizado por Grupo Gestión y CIO Investigación, sobre más de 60 empresas productoras de bienes y prestadoras de servicios que operan en Argentina.
“Antes de la pandemia 43% de las empresas tenía una estrategia de beneficios orientada a complementar salarios, 39% a retener al talento dentro de la empresa y 35% atraer a algunos perfiles en particular”, señala con Juan Pablo de Mendonça, Gerente de RR.HH. de Grupo Gestión.
En este sentido, los rubros más utilizados para implementar esta estrategia estaban concentrados en ofrecer una prepaga, facilitar la formación profesional por medio de capacitaciones y en tercer lugar ofrecer flexibilidad horaria.
“La pandemia modificó la estrategia y los rubros utilizados para llevarla adelante”, explica de Mendonça, quien agrega que “ahora la mayor preocupación está centrada en que los colaboradores puedan lograr un mayor equilibrio entre sus ocupaciones personales y el empleo, lo cual explica que hoy la flexibilidad horaria concentre la preferencia de más de la mitad de las empresas y que el Home Office figure como un beneficio en ocho de cada 10 empresas”.
Impulsadas por los cambios en el mercado laboral, entre 7 y 8 de cada 10 empresas tuvieron que modificar sus estrategias de beneficios, donde el rol principal dentro de aquellas que ofrecen servicios pasó de ser la de atraer empleados a retenerlos y entre las empresas que ofrecen productos pasó de ser la de complementar salarios a equilibrar la vida laboral con la personal.
Desde Grupo Gestión anticipan que “es posible que con la vuelta a la normalidad las propuestas de beneficios vuelvan a modificarse un poco, para ajustarse a la nueva realidad, pero algunos elementos como flexibilidad y home office permanecerán como un elemento diferencial para muchas organizaciones”.