La importancia de implementar la ciberseguridad en los diferentes procesos de las compañías es indiscutible y fundamental para garantizar la integridad, la confidencialidad y la disponibilidad de la información en un mundo cada vez más conectado, pues no sólo se protegen los datos sensibles de individuos y organizaciones, sino que salvaguarda la infraestructura crítica.
En el ciberespacio, México enfrenta un panorama desafiante, evidenciado por un promedio de 1,607 ciberataques semanales desde 2023. De acuerdo con un reporte anual 2024 de ciberataques, México ocupa el sexto puesto en total de ataques de ransomware a nivel mundial.
El volumen mundial de ataques criptográficos aumentó 659% y las amenazas cifradas se dispararon 117%, ya que los ciberdelincuentes optaron por medios más sigilosos y menos arriesgados para sus actividades maliciosas. Los intentos de amenazas mediante malware aumentaron, siendo las zonas de mayor incidencia América Latina, con un 30%, y Estados Unidos, 15%.
El desarrollo de software de seguridad, integrado con IA es fundamental en México por varias razones. En primer lugar, el país enfrenta desafíos significativos en términos de ciberseguridad debido al aumento de las amenazas cibernéticas y la creciente dependencia de la tecnología en todas las industrias.
Además, la inteligencia artificial puede mejorar la capacidad de detección y respuesta de las organizaciones a ataques cibernéticos al analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real e identificar patrones y anomalías que podrían indicar una actividad maliciosa, comenta Hector Triana, Director Comercial de ITAC.
Las principales ventajas de utilizar Inteligencia Artificial en ciberseguridad son: la detección avanzada de amenazas, pues puede identificar patrones y anomalías en grandes volúmenes de datos para detectar amenazas de manera más rápida y precisa que los métodos tradicionales; la automatización de tareas y procesos de detección, análisis y respuesta a incidentes, lo que mejora la eficiencia operativa y reduce el tiempo de respuesta ante ataques.
Fuente: ITAC