La segunda generación del Chevrolet Cruze ya es una realidad. Luego de un fallido intento de General Motors Argentina por ocultar el resultado final de su famoso proyecto Fénix (que tuvo una inversión total de 740 millones de dólares), se acaba de presentar este vehículo mediano de plataforma global que ahora también se produce en la planta de Rosario, Argentina (la primera generación llegaba de Corea).
El Cruze II comenzará a comercializarse en nuestro mercado a fin de mes, únicamente en carrocería 4 puertas (la variante hatchback comenzaría a fabricarse a fin de año). Contará con cuatro versiones: LT manual ($ 350.000), LTZ manual ($ 375.000), LTZ automático ($ 390.000) y LTZ Plus automático (425.000). Todas equipadas con el motor naftero EcoTec de 1.4 litro, con inyección directa de combustible y sobrealimentado con un turbo. Entrega una potencia de 153 caballos de fuerza y un torque máximo de 245 Nm disponible a las 2.000 revoluciones. A su vez, las transmisiones (manuales y automáticas) son de seis velocidades.
Se trata de un motor de última generación, construido en aluminio, y que a partir de 2017 se convertirá en el propulsor naftero más moderno que se fabrique en el país (por ahora las plantas motrices que se monten serán importadas). Será el primer modelo de producción nacional con sistema Start/Stop, que apaga el motor en forma automática mientras el auto se encuentra detenido para reducir el consumo de combustible.
En comparación con el Cruze anterior, esta nueva generación es más larga (68 mm más), más ancha (19 mm), más alta (46 mm) y con una distancia entre ejes mayor (15 mm). Eso sí, la capacidad del baúl se redujo de 450 a 440 dm3, mientras que el tanque de combustible carga 8 litros menos (52 en total).
Editor Periodístico