Históricamente en México, los usuarios que realizaban recargas móviles tenían menos beneficios en comparación de los de postpago al contar, en muchas ocasiones, con tarifas más altas y una menor canasta de servicios.
Durante el primer trimestre de 2017 la cantidad de usuarios que realizan recargas para hacer uso de los servicios móviles de llamadas, envío de SMS y descargar datos asciende a noventa y tres millones, esto es 82.4% del total de líneas celulares.
Teniendo en cuenta esto es que desde hace algunos años los operadores móviles ajustaron sus esquemas de recarga, dejando atrás el cobro individual por cada servicio, para pasar a uno de paquetes que incluyen servicios ilimitados de voz y mensajes cortos, como en el caso de postpago, así como un menor precio en la contratación de datos móviles y/o navegación ilimitada en aplicaciones de redes sociales y mensajería instantánea por un tiempo definido.
A raíz de esto se registró un cambio en la dinámica de recargas y consumo de servicios por parte de los usuarios. A su vez, se tradujo en una menor frecuencia de recarga, tal que la razón del segundo trimestre de 2016 (1.9 veces al mes) es significativamente menor (2.2 veces al mes) frente al mismo periodo del año anterior.
No obstante, en periodos recientes se registra una nueva tendencia en la dinámica de recarga, causada por un repunte en la frecuencia promedio de recarga y esta a su vez, atribuible al recorte del plazo de vigencia de los paquetes de prepago, así como a la reducción del número de MB de navegación por Internet y en apps de redes sociales y mensajería instantánea. Esto último, resultado de la nivelación de precios y paquetes tarifarios, ante la actual dinámica competitiva y de consumo de servicios.
Estas tendencias son; un mayor monto promedio de recarga, el aumento en la frecuencia de la misma, aunado a la estabilización de precios y el creciente consumo de servicios móviles, traerán consigo un repunte en los ingresos móviles, especialmente del segmento de prepago, revirtiendo la tendencia previa a la baja derivada de la trayectoria descendente de tarifas.
Fuente: The Competitive Intelligence Unit