El segundo trimestre de 2017 fue testigo de cómo los atacantes avanzados liberaban nuevas y mejores herramientas maliciosas, entre ellas tres exploits de día cero y dos ataques sin precedentes: WannaCry y ExPetr. Por ello, se necesitan no sólo plataformas y tecnología más sofisticadas que prevengan este tipo de ataques sino empresas y consumidores más educados en cuanto a los riesgos en el entorno digital.
Frente a los atacantes, que son cada vez más sofisticados, se requiere de una postura seria y robusta en materia de tecnología para reforzar la seguridad. Microsoft cuenta con experiencia en el desarrollo de soluciones inteligentes y plataformas que están en constante evolución, integrando la seguridad a escala global a través del uso más inteligente de datos e información.
Las herramientas de seguridad de la firma mejoran de manera continua, con datos recabados desde la plataforma del “Intelligent Security Graph”, que sirve como el tejido conector entre las soluciones de seguridad. Desde aquí se recaba información de valor acerca de las tendencias de ataques globales para poder tomar acciones informadas e inmediatas. Así, se recaban y estudian miles de millones de datos que provienen de diversas fuentes dentro de la misma plataforma a nivel global para prevenir amenazas.
Andrés Rengifo, director de la unidad de crímenes cibernéticos y propiedad intelectual para Microsoft Latino América explicó que “En tiempos de transformación digital, tanto las empresas como las personas aprovechan las oportunidades que ofrece la nube y la tecnología móvil, lo que a su vez implica asumir nuevos retos. Precisamente, uno de los retos más importantes es garantizar niveles óptimos de seguridad y protección. En este sentido, Microsoft a través de su postura única en materia de seguridad puede ayudar a prevenir efectivamente los riesgos y amenazas informáticas”.
Además de brindar tecnologías más seguras se requiere que las personas adopten nuevos y mejores hábitos en torno a la ciberseguridad para así evitar posibles ataques. Es sabido que más del 90% de los ataques se originan a través de phishing o suplantación de identidad, lo que se concreta cuando usuarios hacen clic en links que contienen malware o sustraen su información. Para esto se necesitan usuarios más educados entorno a la seguridad informática. No basta disponer de la tecnología más segura si los usuarios no la usan.
Como parte del compromiso de Microsoft de ofrecer un ecosistema más seguro para las personas, empresas y gobiernos, además de alentar una conducta más cívica en Internet, la compañía dio a conocer el Índice de Civismo Digital (DCI, por sus siglas en inglés) en el cual se muestra que los riesgos en línea tienen consecuencias en el mundo real.
De acuerdo con los resultados Latinoamérica estuvo 12 puntos por debajo del promedio del resto del mundo. Hubo una brecha de 20 puntos cuando se incluyó el riesgo de exposición para familia y amigos. En 2017 se mantuvo y se agregaron dos riesgos a la categoría Intrusivo y uno a la categoría Conductual. Sin estos cambios, el DCI hubiera estado dos puntos por debajo del 72%. Esta cifra resalta la importancia de contar en la región con tecnología segura y confiable, y con herramientas que ayuden a detectar y prevenir amenazas a la información de empresas y usuarios.
En la categoría de Intrusión, en la versión de este año, el contacto no deseado fue el riesgo más común en América Latina con un 52%, 14 puntos por encima del resto del promedio mundial. Adicionalmente los engaños, estafas y fraudes obtuvieron un 28% y la misoginia un 4% sumaron seis puntos a dicha categoría.
